Niño Perdido Madre Nº4 Casa Jaimico.
La Calandria - Bodegas Pura Garnacha
Vino generoso de garnacha único e irrepetible.
Este vino es un tesoro que proviene de las faldas del Moncayo, entre las fronteras de Navarra y Aragón. Este vino rancio que sufre una larga crianza oxidativa es pura diversión para los sentidos.
Todo el proyecto de los niños perdidos es una recuperación de los grandes vinos familiares que se elaboraban en aragón con la variedad garnacha por las familias en sus cuevas subterráneas.
Después de una búsqueda minuciosa se han encontrado barricas (madres) donde se guarda durante años vinos de garnacha que se oxidan para dar lugar a vinos rancios con matices increíbles en la nariz y bocas voluminosas y potentes. Pura Garnacha con Historia.
Estos vinos con muchos años en las madres tienen un complejo proceso de rehidratación con vinos también viejos, pero menos, que solo permite tener pequeñas cantidades del vino en botellas de 375 CL. En este caso solo se producen un máximo de 80 botellas.
El origen de este Niño Perdido Madre Nº4 es la Cada Jaimico, una casa de montaña en el Moncayo donde este barril con su madre se rellenaba cada luna menguante de enero con garnachas de 19 o 20 grados por los abuelos dueños de la casa.
Tras su muerte la casa sufre una reforma y el barril quede escondido bajo múltiples cajas de enseres diversos.
Cuando se encontró la madre estaba muy deshidratada, pero se pudo salvar y ahora es parte de los niños perdidos, con el mismo carácter que en niño perdido nuero tres.
Pura arqueología enológica para pocos afortunados.
96 puntos Guía Peñín
Directo de bodega en 72 HORAS para mantener sus propiedades únicas.
Disfruta de vinos únicos al mejor precio. Directo de bodega
CATA VISUAL
Color rojo teja de capa media. Con tonos teja y caoba.
CATA OLFATIVA
Vino muy viejo, con ricos acetaldehídos, ligeras notas de barniz y frutos secos como la avellana y la almendra.
CATA GUSTATIVA
La boca es, sin duda, el broche final al igual que el Niño Perdido nº3 una demostración de fuerza y perdurabilidad. Superiro presencia, ya que encierra una oxidación elegante, con un sabor muy intenso, permisible e irrepetible
MARIDAJE
Quesos azules, sobremesas y celebraciones felices de la vida. Es un complemento más a nuestra felicidad sensorial.
Vino Rancio Seco. Vino de Madre.
Barrica encontrada en la faldas del Moncayo en una bodega familiar anónima que se ha recuperado con otros vinos viejos.
Proceso oxidativo en barrica de al menos 70 años.
Se elaboran 36 botellas de 375 CL que se compran en caja individual.
Su elaboración en cueva subterránea y tiempo asegura un vino único y diferente solo para unos pocos afortunados.
Peñín | 96 |
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D.O./IGP | Sin Denominación de Origen |
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Provincia | Zaragoza |
Variedades |
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Tipo de vino | Generoso |
Crianza | |
Barrica |
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Grado alcohólico | 20.00º |
Tª de servicio | 18.00º |
Tamaño | 0.33 L |