Comprar vino directamente de Pago de Arínzano

Terruño, historia, arte y entorno

Situada en el noroeste de España en Tierra Estella (Navarra) entre La Rioja y Burdeos, se encuentra la impresionante Propiedad de Arínzano un espacio protegido que constituye un rico hábitat natural. Ocupa un rico valle formado por las últimas estribaciones de los Pirineos, dividido por las tortuosas aguas del río Ega.

En un entorno tan privilegiado destaca por la exclusividad del terruño, su historia, arte y entorno, además del potencial excepcional para elaborar vinos de la máxima calidad y carácter singular.

Todo con la meta de elaborar vinos que expresaran el carácter único de los viñedos utilizando las técnicas más avanzadas para garantizar un tratamiento artesanal a lo largo del proceso, así como desarrollando una viticultura que respete y favorezca el entorno natural. Como resultado, Arínzano es uno de los pocos terruños en España a los que se ha reconocido el estatus de Pago siendo el primero en obtener la calificación en todo el Norte de España.

Solo así es posible desarrollar las viñas y las elaboraciones hasta el máximo de su potencial, a la vez que se protege el legado y la belleza natural que Propiedad de Arínzano ha heredado.

Así, los viñedos de Arínzano fueron plantados en 1988 y se localizan en un área de geología compleja, mostrando cada parcela unas características diferenciales. Los suelos de los viñedos son de origen, en su mayoría, terciario, con proporciones variables de limos, margas, arcilla y degradación de roca calizo-calcárea. Además, los exclusivos microclimas crean un ambiente singular para el cultivo de la vid. De las 355 hectáreas de la propiedad, 128 están dedicadas al cultivo de viñedos de Pago. Además, la bodega, en torno a la que gira toda la actividad es obra del prestigioso arquitecto Rafael Moneo.