El bag in box, las cajas mágicas del vino

El bag in box como su nombre indica no es más que una bolsa dentro de una caja, con un dispensador o grifo para poder ir extrayendo el contenido que tenga.

La bolsa es doble de material plástico formada por una bolsa interior de polietileno y una bolsa exterior multicapa, pudiendo incluir alguna capa que le confiera propiedad barrera, como pueden ser láminas metalizadas de PET, PVDC, EVA o EVOH.

Además, la caja de cartón cumple una misión de protección frente a la luz y los golpes para mantener la bolsa y el contenido de la misma intacto.

Vamos a analizar este formato de venta de vino, que ya es de los más demandados en los países nórdicos y que poco a poco está encontrando su hueco en España

Bag in box, más ecológico, práctico y económico, ¿el futuro del vino?

Envase 100% reciclable.

Estos envases formados por caja de cartón, bolsa de plástico doble, que suele elaborarse con plásticos 100% reciclables, así como el grifo anti-goteo de la caja.

Es una muy buena forma de contribuir a la reducción del cambio climático, además de por su formato de 3 o 5 litros ideal para tener en la nevera y disfrutar de vino a temperatura perfecta en cualquier ocasión con el mínimo espacio.

Más económico, sostenible y responsable que el vidrio.

El vidrio es un recipiente clásico en el vino, es reciclable y además podemos encontrarlo en múltiples formatos, pero la creación de la botella tiene una alta huella de carbono, por eso se está buscando botellas más ligeras.

El bag in box reduce hasta 8 veces más la huella de carbono que 0.75cl de vidrio, porque tiene mayor capacidad, sus elementos son más fáciles de producir y necesita menos energía que horno donde se moldean las botellas.

Por tanto, es más práctico, más cómodo, ya que tenemos más vino en menos espacio y su conservación es perfecta en la caja.

Vinos frescos y en perfecto estado por mucho tiempo.

Ya hemos comentado que la bolsa que contiene el líquido es de varias capas, pensada para que el vino esté fresco, sin contacto con la luz o el oxígeno.

Cuando se llena la bolsa se cierra con un dispensador o grifo anti-goteo que al abrirse hace que salga el vino, pero no permite la entrada del oxígeno.

Por tanto, una vez abierto, el vino no se oxida. Se mantiene vivo y fresco durante al menos 4 semanas.

Fácil almacenaje y fácil servicio.

Hace años nos sorprendimos porque los japoneses habían creado genéticamente sandías cuadradas para facilitar el guardar la sandía en la nevera y mejorar su transporte.

EL bag in box de 3 litros y el de 5 litros son perfectos para cualquier nevera, podemos tener vinos blancos perfectos que rellenamos con un grifo que además no gotea directamente de la nevera.

O tener vinos tintos de mucho nivel, que se sacan directamente en una bonita jarra y tendremos impresionados a todos nuestros invitados.

Y es que un bag in box es tan fácil como abrir un grifo que no gotea y disfrutar de un vino fresco y de calidad todos los días. A un mejor precio.

Mejores compras de bag in box.

Hoy en día es difícil conseguir en España grandes vinos de bag in box, aunque hay algunas excepciones de bodegas importantes que han decidido apostar por los vinos de calidad en este formato de Bag in Box.

Queremos destacar Vitalpe en el Penedés que ha realizado un trabajo increíble en cuanto a calidad y marketing, consiguiendo un producto de clase mundial.

No podemos olvidar a bodegas el Mesto en Ciudad Real, que ha puesto dentro del bag in box sus productos más representativos.

Y vinos Guerra que desde el Bierzo lleva apostando por este formato para el negocio nacional e internacional.