Vinos y San Juan: tres maridajes para otros tantos deseos

San Juan y vino. El solsticio de verano. La noche más corta del año, aunque a más de uno al final se le haga un poco más larga de la cuenta. La playa, el agua del mar, las hierbas aromáticas, cuidado con los espejos, espantar a las meigas y los malos espíritus, atraer la suerte y el dinero, encontrar el amor, la luna, parejas eternas, muchos deseos y, por supuesto, hogueras.

Curioso lo del fuego para dar la bienvenida a la estación más calurosa del año. Mucho, como si no fuera suficiente con el sofocante calor que hará durante los siguientes tres meses. Menos mal que ahí también suele estar el mar para refrescarse luego. También las bebidas fresquitas.

Sí, el vino y San Juan tienen mucha más relación de lo que puede parecer. Eso sí, hay vida más allá de las queimadas, pomadas y zurracapotes. Claro que sí…

Vinos largos para la noche más corta del año.

Y mejor, aún si se trata de vinos largos… De los que permanecen el recuerdo y también porque el tiempo vuela.

La noche de San Juan, tan solo durará 8 horas y 57 minutos. Menos que cualquier otro día. ¡La cuenta atrás está a punto de empezar y hay mucho que preparar! Demasiadas tradiciones con las que cumplir y durará mucho menos de lo que canta un gallo.

Por cierto, lo hará mucho antes que cualquier otro día del año. Pero, no hay problema ni calor ni fuego que lo derrita si se disfruta con un Verdejo de Rueda.

Fuego que todo lo purifica por San Juan y que arde con esencia de volcán

Quemar lo malo y purificar lo bueno, lo que está por venir en forma de deseo. El fuego sobre lo que todo gira en la noche de San Juan. Alrededor y también se salta.

Siempre un número impar de veces no vaya a ser que por cosas de la superstición no se vean realizados. Hay lugares en los que lo hacen a caballo y en otros descalzos sobre las brasas y… pisando fuerte.

Sin embargo, quienes así lo hacen dicen que es más peligroso el humo que el fuego. Así que, ¡cuidado! No vaya a hacer llorar a más de uno como, sin duda lo hará, este rosado de lágrima de la Tierra de fuego y no, precisamente, la de Argentina o Chile sino de Lanzarote.

Listán de lo más refrescante y de las laderas del Timanfaya para que vaya subiendo la temperatura. Caliente, caliente…

Luna nueva y la completa oscuridad de las barricas de la Tinta de Toro

No será luna nueva en San Juan, pero casi, casi. La noche más corta del año y no es que la luna no vaya a estar ahí menos tiempo que durante el resto del año. Exactamente estará ahí arriba en el cielo 15 horas y 17 minutos.

Tampoco será el día en que salga más tarde. Eso llegará una semana después… Aun así, esta festividad tiene mucho que ver, y nunca mejor dicho, con este satélite natural.

Sí, porque lo que tiene la noche más corta del año, especialmente en 2022, será la llamada superluna. Ningún otro día estará tan cerca de la Tierra y permitirá verla más grande y brillante que habitualmente. Y ya se sabe… bajo la luz de la luna, yo te amé. Eso cantaban los rebeldes y es algo que pasa mucho con los vinos de Toro. ¡Comienzan los amores de verano!

La magia de la noche de San Juan y el conxuro del Albariño de Rías Baixas

Eso sí, para conseguirlos aún hay quien recurre a los hechizos y a los conjuros. La noche de San Juan también va un poco de eso. De magia y brujas, pero nunca de maldiciones. Siempre en positivo.

Quemar en el fuego lo malo y purificar lo bueno en el agua del mar. De pedir tres o más deseos, así es más fácil que alguno caiga; atraer suerte o mejor aún dinero, cumplir fantasías y hacer muchas cosas un poco raras.

En cada sitio tienen las suyas… Desde dormir con mil hierbas aromáticas bajo la almohada para alejar los malos augurios hasta huevos. Eso para las que se van a casar. Y es que este día hay que echarle muchos y no solo para saltar la hoguera o caminar sobre las brasas.

Y para conxuro el del Albariño de Rías Baixas. Además, parece cosa de meigas.

Maridajes de fuego, agua y luna: más vinos para San Juan

Energía para una de las noches más mágicas del año y solo a través de la que concentra la naturaleza a través del fuego, el agua y la luna.

Beber y también comer. Lo más tradicional es la coca, pero cada región tiene su propia versión. Desde la tradicional de piñones hasta la de crema o chocolate. También se llevan las de chicharrones, atún o con huevo. Más sencillo que hacerlas es maridarlas. Tan solo se necesita un buen cava.

Tampoco pueden faltar las albóndigas con tomate o los macarrons de Sant Joan en Baleares o el bacalao y el chorizo en Euskadi. Eso sí, siempre mejor con sidra.

Sin embargo, la estrella es la sardina. Desde La Coruña a Málaga con sus espetos no pueden faltar en ninguna de las brasas. Fuego que purifica y también da sabor.

Vinos y San Juan, y en CataTú están todos al mejor precio para no parar de disfrutar y dar la bienvenida al verano.