Súper vinos para la Super Bowl. Maridajes made in USA

Vinos para la Súper Bowl. La fiesta del deporte en Estados Unidos y también la de la comida. No hay día en todo el año en el que se coma o se beba más, salvo en Acción de Gracias. Medirlo en toneladas sería algo inútil porque las cifras van mucho más allá. Tanto como las de la publicidad o las de las audiencias. El segundo programa más visto de todos los tiempos tan solo por detrás del capítulo final de la serie M*A*S*H.

Solo para hacerse una idea, cada año durante el partido caen 1.300 millones de alitas de pollo y eso son un montón de pollos. Lo que nadie dice es lo que luego hacen con el resto de la carne de estas aves. Por si todo esto fuera poco, luego hay que sumarle todo lo demás porque ese es solo el aperitivo… hamburguesas, perritos calientes, pizzas, chili con carne, nachos con guacamole, subs y sándwiches… y, además, están los que encienden la barbacoa.

Maridajes que son mejores que un Touchdown

En total, la estadística dice que se meten entre pecho y espalda la nada despreciable cantidad de 6.000 calorías. Así que, está claro… ¡el partido al final es siempre lo de menos!

Eso sí, comen y también beben y ahí la reina es la cerveza. Tres de cada cuatro americanos consumirán grandes cantidades durante los 60 minutos que dura el juego. En total, 325 millones de galones. Por si alguien quiere saber cuántos litros son solo hay que multiplicar por 3,78. Es decir, que casi por cada alita de pollo se toman una litrona.

Para hacerse una idea completa es bueno recordar que en Estados Unidos viven 330.000.000 personas. También hay quien lo hace con más estilo y decide descorchar una botella de vino. Solo en las dos semanas previas al encuentro gastan más de 680 millones de dólares en esta apasionante bebida.

Pura emoción… los mejores vinos para la Super Bowl

Eso es la mitad que de cerveza, pero tampoco está nada mal. Cabernet Sauvignon, Chardonnay y Sauvignon Blanc del Valle de Napa; Pinot Noir, Merlot y Zinfandel de la región de Sonoma; Syrah, Cabernet franc y Garnacha de las montañas de Santa Cruz… Y, sin embargo, no hay nada que maride mejor con un ¡touchdown! que Rioja, Ribera del Duero, Rías Baixas y hasta Jumilla, pero antes lo mejor es pasar por la cadena de comida rápida que es lo que se lleva. Lo de usar la cocina sigue siendo solo cosa de los programas de reformas y decoración y, precisamente, de la cena de Acción de Gracias.

Alitas de pollo fritas (y mejor picantes) y Chardonnay

Típico de los estados del Sur y el que más suena es el Kentucky, pero hay muchos más sitios en donde comprarlo y disfrutarlo. De hecho, en este estado del país no es el favorito. Aun así, hay que reconocerle su mérito. El más famoso del mundo  por su secreta combinación de 11 hierbas y especias. Y, sin embargo, lo que poca gente sabe es que la verdadera innovación no está en tan especial macerado sino en la forma de freírlo.

En ollas a presión. Sí, como suena, aunque pueda parecer arriesgado. Crujiente y sabroso. ¡Como para chuparse los dedos! También que la receta original no es americana sino escocesa, pero lo que todo el mundo debe conocer es que su mejor maridaje no es cerveza. Mucho más recomendable es un Chardonnay bien fresquito.

Pizza con extra de pepperoni y Tempranillo joven

Maridaje redondo como un balón, aunque el de fútbol americano sea ovalado. Por eso se trata del segundo plato más consumido durante el partido. Masa fina o gruesa; con el borde relleno de queso; con salsa barbacoa; con extra de pepperoni, la favorita de los estadounidenses… Lo importante es que Super Bowl es sinónimo de pizza, always pizza. No dan abasto los repartidores y, por este motivo, solo ese día los restaurantes ofrecen importantes descuentos a los que vayan a recogerlas al local.

En total, son más de 15 millones de tamaño familiar o más de 120.000.000 de porciones. Se coman las que se coman, lo mejor es disfrutarla con un Tempranillo de cualquier lugar de España. Por cierto, nada de Hawaiana que en realidad es alemana.

Nachos con guacamole y un clarete o rosado, bien fresquito

Con guacamole y mucho más. De hecho, la fruta con la que se prepara y los nachos son lo de menos y eso que las cifras son también de vértigo. Más de 139,4 millones de libras de aguacates comprados los días previos al encuentro para hacer guacamole, mojar, untar y también para dipear. Irresistible.

El toque saludable a tanta caloría si no fuera porque es solo el principio. Pasa un poco como con las ensaladas… se le empiezan a echar cosas y al final lo verde desaparece… El clásico es con carne, tomate, pimiento, jalapeños, quizá unos taquitos de beicon y a tope de queso. Cheddar, mozarella, pero el que nunca debe faltar es el famoso pico de gallo. Por eso, lo mejor para acompañarlos es un clarete o rosado bien fresquito. ¡Intensidad y pura emoción!

Y más vinos y maridajes para el post partido

Por cierto, el aguacate es protagonista en la mesa y en el terreno de juego. Sin, duda uno de los anuncios más esperados en el descanso. Así, antes de que se acabe el tiempo y se pite el final se habrán consumido 11,2 millones de libras de papas fritas, 3,8 millones de palomitas de maíz, 3 de nueces, 12,5 de tocino o 10 de costillas. ¡Casi nada! Sin embargo, otros de los platos favoritos para este día son: chili con carne, hamburguesas y hot dogs, y patatas rellenas de puro sabor.

Lo mejor de todo es que cada una tiene su maridaje y en CataTú están los mejores vinos para la Super Bowl o cualquier otro evento deportivo.

Además, siempre al mejor precio y directo de bodega para disfrutarlos en casa como hay que hacerlo. En pantalla gigante y rodeado de amigos para gritar todos juntos… ¡Touchdown!